No recordaba como había llegado hasta allí. Pero allí
estaba, en frente de la puerta de la Iglesia vieja mirando las esquelas de los
recientemente fallecidos.
Seguramente debí levantarme temprano. Debí hacer mis ejercicios
matutinos, luego debí haberme desayunado y finalmente debía haber ido a la
facultad para seguir mis clases de derecho. Pero no recordaba nada, y estaba
aquí en frente de la iglesia, mirando las esquelas y sin recordar como había
llegado hasta allí. Todo era muy extraño, la faculta de Derecho estaba
precisamente en la dirección contraria, no comprendía como podía haberme desviado
tanto de mi camino.